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Contra el concepto de tecnología de punta, Social 21-La Tendencia, eleva el de tecnología conveniente. El primero supone una única dirección de avance, un único sentido del progreso y de la evolución tecnológica; es funcional a la muerte de las ideologías y al capitalismo hegemónico excluyente. El segundo concepto reconoce la subordinación de la tecnología a la política y la economía; por lo tanto, para él hay tantas direcciones de avance como políticas se establezcan, y hay tanto progreso como la economía exija. No separamos la economía de su madre política, como tampoco el cuerpo del espíritu. El Astillero Río Santiago, su banco de pruebas, el taller de mecánica y la línea de producción de Grandes Motores Diesel, fueron testigos privilegiados de la transformación de las líneas de producción de los fabricantes del centro del capitalismo, allá por la crisis del petróleo del ’73. Existía en esa argentina industrial, un pensamiento político y tecnológico potente del Pueblo Trabajador, más allá del debate por el salario y condiciones de trabajo. Continuarlo, es recuperar poder político. Grande Motori Triese de FIAT, hacía gala de un bajísimo costo de mantenimiento y del carácter omnívoro de sus motores marinos. “Si se queda sin fuel oil, dele pasto, que andará igual… nosotros fabricamos motores, no relojes”, provocaban los técnicos italianos, a sus competidores de Sulzer. Los suizos de Sulzer y los dinamarqueses de Burmester und Wain, señalaban el bajo rendimiento térmico del FIAT GMT, es decir, su enorme gasto de combustible. Ellos obtenían la misma potencia con una fuerte economía en fuel oil. Eso sí, reconocían, nuestros motores requieren de un mantenimiento calificado y control periódico de su puesta a punto. Del lado de la confiabilidad, los alemanes de MAN, y los japoneses de Mitsubishi Heavy Industries, producían motores que jamás fallaban, y resistían el castigo, las largas marchas forzadas, al 110% de potencia y todos los abusos posibles. La norteamericana Caterpillar y la finlandesa Wärtsilä destacaban en el bajo costo de adquisición inicial, aunque los gastos de mantenimiento y repuesterío no eran tan baratos. Los franceses de Pielstick resolvían mejor que otros la relación peso/potencia, con motores compactos que también tenían su público. Pero este orden, esta repartija del mercado, donde cada uno tenía su nicho, para 1973, se fue al carajo. El brutal aumento del petróleo, a partir de la cartelización de los países proveedores del mercado internacional organizados en la OPEP, destruyó las ventajas comparativas de casi todas las marcas de GMD, elevando el bajo consumo de fuel oil por sobre cualquier otra cualidad.
Gustavo López, abogado, periodista y presidente de la Fuerza de Orientación Radical de la Jóven Argentina (FORJA), sobre la reunión con Alberto Fernández y Matías Lammens en la cena que los radicales "alfonsinistas" organizaron en un encuentro vinculado al ex presidente Raúl Alfonsín. La oportunidad que significaría el triunfo de Alberto Fernández para el radicalismo; la necesidad de construir desde la oposición y de unir coincidencias, y el reconocimiento al abordaje político desde la unidad que ha encarado el candidato a presidente Alberto Fernández.
4 years, 6 months ago by revista.hamartia