March 27, 2017 09:08
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Esta conducta de espionaje, este delito de inteligencia sobre el grupo político de la Dra. Kirchner y el no cumplimiento de la órden de destrucción de las escuchas. Son delitos que ya denunciamos. Lo grave de la comunicación de ayer es que el mismo medio dice que tienen todas las escuchas que ordenó Lijo. Con lo cual no se trata de una filtración sino que les dieron todas las grabaciones. Y la responsabilidad de esto es de Macri, que lo hizo a través de Arribas y Majdalani, a cargo de las escuchas. Y también de Lorenzetti, ya que la Corte Suprema está a cargo de las escuchas. Y además el Dr. Lijo que es quien ordenó las escuchas y tenía que custodiarlas. Ahora nos damos cuenta porqué Macri le sacó las escuchas a la procuraduría, para, con la complicidad de Lorenzetti, hacer estas escuchas. Todo esto es de una gravedad enorme desde lo institucional y política. Las comunicaciones privadas tienen la garantía constitucional de la privacidad, que en este caso no se cumplió. Además, de las escuchas no surgió ningún delito, sino ya hubieran hecho alguna denuncia. Solo el payaso de Marijuán, cuando se dan a publicidad las escuchas, recién ahí hace una causa impresentable por dichos privados que no constituyen ningún delito. Read more
Esta conducta de espionaje, este delito de inteligencia sobre el grupo político de la Dra. Kirchner y el no cumplimiento de la órden de destrucción de las escuchas. Son delitos que ya denunciamos. Lo grave de la comunicación de ayer es que el mismo medio dice que tienen todas las escuchas que ordenó Lijo. Con lo cual no se trata de una filtración sino que les dieron todas las grabaciones. Y la responsabilidad de esto es de Macri, que lo hizo a través de Arribas y Majdalani, a cargo de las escuchas. Y también de Lorenzetti, ya que la Corte Suprema está a cargo de las escuchas. Y además el Dr. Lijo que es quien ordenó las escuchas y tenía que custodiarlas. Ahora nos damos cuenta porqué Macri le sacó las escuchas a la procuraduría, para, con la complicidad de Lorenzetti, hacer estas escuchas. Todo esto es de una gravedad enorme desde lo institucional y política. Las comunicaciones privadas tienen la garantía constitucional de la privacidad, que en este caso no se cumplió. Además, de las escuchas no surgió ningún delito, sino ya hubieran hecho alguna denuncia. Solo el payaso de Marijuán, cuando se dan a publicidad las escuchas, recién ahí hace una causa impresentable por dichos privados que no constituyen ningún delito.