September 06, 2019 08:41
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6 Septiembre 2019 / 09:00 Flavio Galimberti es panadero y en diálogo con La Barra de Casal relató que ayer jueves tomó junto a su esposa la decisión de cerrar su panadería producto de la crisis que afrontan. La panadería en cuestión se llama "Alimenntos con amor" y se encuentra ubicada en Bv. Seguí 3225, Flavio publicó en Facebook la difícil decisión que tuvo que tomar a través de su cuenta de Facebook. <iframe src="https://www.facebook.com/plugins/post.php?href=https%3A%2F%2Fwww.facebook.com%2Feventosconamor.conamor%2Fposts%2F1380280565457063&width=500" width="500" height="249" style="border:none;overflow:hidden" scrolling="no" frameborder="0" allowTransparency="true" allow="encrypted-media"></iframe> Comentó que en el momento que estaba compartiendo el mensaje con sus seguidores, la red social le recordó una foto de hace once años cuando había fundado su comercio. "Paradojico, parece una burla del destino, hace once años tome la decisión de emprender el camino de la independencia, del negocio propio, me tocó hoy once años después cerrar", manifestó. Consultado por su actividad previo a decidir independizarse con su comercio propio, indicó que trabaja desde los quince años y pasó por diferentes trabajos, primero fue cartero, luego cadete en moto, cinco años trabajó de distribuidor de una importante panadería y confitería de la ciudad, y finalmente cuando pudo juntaar ahorros decidió emprender el negocio, y ahí abrió la panadería. Aseguró que en el 2015 vaticinaba junto a su mujer lo que podría suceder. "La que se nos viene, se nos viene un ajuste", le había dicho ella, él en ese momento sostuvo: "tranquila esta a nosotros no nos toca, nadie va a dejar de comer pan". "Y se viene una situación difícil", contó que le respondió su pareja. En ese entonces Flavio trabajaba junto a nueve personas y había invertido 50 mil dólares en nueva maquinaria. "Me siento un fracasado, porque se me va el negocio que yo había pensado y soñado para toda mi vida", expresó y contó que se trata de un local de 200 metros cuadrados, con dos hornos rotativos grandes y tres mesas de trabajo. Reconoce asimismo que tiene esperanzas de que esto sea solo un párate. El 30 de septiembre cerrarán finalmente las puertas. "Estoy fundido pero sin deudas, voy a cerrar las persianas y no le debo un peso a nadie", dijo y agregó que las maquinarias y demás siguen siendo de su propiedad. Read more
6 Septiembre 2019 / 09:00 Flavio Galimberti es panadero y en diálogo con La Barra de Casal relató que ayer jueves tomó junto a su esposa la decisión de cerrar su panadería producto de la crisis que afrontan. La panadería en cuestión se llama "Alimenntos con amor" y se encuentra ubicada en Bv. Seguí 3225, Flavio publicó en Facebook la difícil decisión que tuvo que tomar a través de su cuenta de Facebook. <iframe src="https://www.facebook.com/plugins/post.php?href=https%3A%2F%2Fwww.facebook.com%2Feventosconamor.conamor%2Fposts%2F1380280565457063&width=500" width="500" height="249" style="border:none;overflow:hidden" scrolling="no" frameborder="0" allowTransparency="true" allow="encrypted-media"></iframe> Comentó que en el momento que estaba compartiendo el mensaje con sus seguidores, la red social le recordó una foto de hace once años cuando había fundado su comercio. "Paradojico, parece una burla del destino, hace once años tome la decisión de emprender el camino de la independencia, del negocio propio, me tocó hoy once años después cerrar", manifestó. Consultado por su actividad previo a decidir independizarse con su comercio propio, indicó que trabaja desde los quince años y pasó por diferentes trabajos, primero fue cartero, luego cadete en moto, cinco años trabajó de distribuidor de una importante panadería y confitería de la ciudad, y finalmente cuando pudo juntaar ahorros decidió emprender el negocio, y ahí abrió la panadería. Aseguró que en el 2015 vaticinaba junto a su mujer lo que podría suceder. "La que se nos viene, se nos viene un ajuste", le había dicho ella, él en ese momento sostuvo: "tranquila esta a nosotros no nos toca, nadie va a dejar de comer pan". "Y se viene una situación difícil", contó que le respondió su pareja. En ese entonces Flavio trabajaba junto a nueve personas y había invertido 50 mil dólares en nueva maquinaria. "Me siento un fracasado, porque se me va el negocio que yo había pensado y soñado para toda mi vida", expresó y contó que se trata de un local de 200 metros cuadrados, con dos hornos rotativos grandes y tres mesas de trabajo. Reconoce asimismo que tiene esperanzas de que esto sea solo un párate. El 30 de septiembre cerrarán finalmente las puertas. "Estoy fundido pero sin deudas, voy a cerrar las persianas y no le debo un peso a nadie", dijo y agregó que las maquinarias y demás siguen siendo de su propiedad.