"Milei. Odio por cadena nacional", por Marcela Colcerniani

Nos aproximamos a las elecciones del 7 de septiembre en la Provincia de Buenos Aires, y a las elecciones nacionales del 26 de octubre, que señalarán la mitad del período presidencial, entre toneladas de información basura generada por ejércitos de trolls y la red de medios monopólicos que nos distraen de la tragedia perpetrada cotidianamente por este gobierno, al que ya podemos caracterizar de Odio Brutal. La reacción en la calle de todos los sectores afectados por un presidente que dice que ama destruir al Estado Nacional ha ganado, hasta las portadas internacionales. Milei se ensaña contra los más frágiles del sistema, para alborozo del poder real que lo eligió como catalizador de décadas de resentimiento. A pesar de todo, nuestro pueblo resiste en las calles sin desmayo desde el momento en que se conoció el DNU 70/23, ilegal, que debería declararse nulo de nulidad absoluta, ya que importa una verdadera reforma constitucional encubierta, junto a la Ley Bases y el Rigi, y a las decenas de decretos sin necesidad ni urgencia que arrasan con el Estado de Derecho Argentino. La oligarquía privilegiada es beneficiaria de pingues ganancias que le reportan las políticas de transferencia de riqueza desde las mayorías populares hacia el capital financiero las agroexportadoras y energéticas ligadas a las multinacionales y a los fondos buitres, base de sustentación del gobierno. Esto explica el blindaje financiero que le proporciona el FMI, amén del mediático y judicial, las dos patas del Lawfare, muy a pesar de los escándalos que atraviesan a su gobierno. Sin Lawfare no habrían sacado de la cancha a Cristina Kirchner, a quien el estáblishment teme mas que a nadie, porque su estatura de estadista reconocida a nivel mundial, y el profundo amor de su pueblo, la convertían en una espada fundamental para las elecciones. Resulta que, aunque de las elecciones no se habla, ellas preocupan a los factores del poder. El financiamiento del FMI, la estabilidad del dólar, y la supuesta baja inflacionaria, clave de la protección que le dispensa Trump que ya envió a su Embajador Lamelas a fiscalizar la marcha de todo, dependen de quién ganará, y de cómo se comunicará, el resultado de estas elecciones. Esto tiñe de un voltaje muy especial al proceso eleccionario, clave no solo para el destino de nuestra Patria sino para el devenir de América Latina y Caribe, hoy tensionada entre la avanzada de la ultra derecha, y los gobiernos populares que defienden los intereses regionales de nuestra Patria Grande, estigmatizados por el estáblishment por eso mismo. Por esto, debemos dotarnos como sociedad, de cabeza, corazón, y coraje, que contagie a las mayorías y a nuestros referentes para fortalecer la unidad que comience a sentar las bases de la reconstrucción de la Patria. Recordando al Papa Francisco, Nadie se salva solo, y como decimos nosotros, solo el Pueblo salvará al Pueblo. Read more

Nos aproximamos a las elecciones del 7 de septiembre en la Provincia de Buenos Aires, y a las elecciones nacionales del 26 de octubre, que señalarán la mitad del período presidencial, entre toneladas de información basura generada por ejércitos de trolls y la red de medios monopólicos que nos distraen de la tragedia perpetrada cotidianamente por este gobierno, al que ya podemos caracterizar de Odio Brutal. La reacción en la calle de todos los sectores afectados por un presidente que dice que ama destruir al Estado Nacional ha ganado, hasta las portadas internacionales. Milei se ensaña contra los más frágiles del sistema, para alborozo del poder real que lo eligió como catalizador de décadas de resentimiento. A pesar de todo, nuestro pueblo resiste en las calles sin desmayo desde el momento en que se conoció el DNU 70/23, ilegal, que debería declararse nulo de nulidad absoluta, ya que importa una verdadera reforma constitucional encubierta, junto a la Ley Bases y el Rigi, y a las decenas de decretos sin necesidad ni urgencia que arrasan con el Estado de Derecho Argentino. La oligarquía privilegiada es beneficiaria de pingues ganancias que le reportan las políticas de transferencia de riqueza desde las mayorías populares hacia el capital financiero las agroexportadoras y energéticas ligadas a las multinacionales y a los fondos buitres, base de sustentación del gobierno. Esto explica el blindaje financiero que le proporciona el FMI, amén del mediático y judicial, las dos patas del Lawfare, muy a pesar de los escándalos que atraviesan a su gobierno. Sin Lawfare no habrían sacado de la cancha a Cristina Kirchner, a quien el estáblishment teme mas que a nadie, porque su estatura de estadista reconocida a nivel mundial, y el profundo amor de su pueblo, la convertían en una espada fundamental para las elecciones. Resulta que, aunque de las elecciones no se habla, ellas preocupan a los factores del poder. El financiamiento del FMI, la estabilidad del dólar, y la supuesta baja inflacionaria, clave de la protección que le dispensa Trump que ya envió a su Embajador Lamelas a fiscalizar la marcha de todo, dependen de quién ganará, y de cómo se comunicará, el resultado de estas elecciones. Esto tiñe de un voltaje muy especial al proceso eleccionario, clave no solo para el destino de nuestra Patria sino para el devenir de América Latina y Caribe, hoy tensionada entre la avanzada de la ultra derecha, y los gobiernos populares que defienden los intereses regionales de nuestra Patria Grande, estigmatizados por el estáblishment por eso mismo. Por esto, debemos dotarnos como sociedad, de cabeza, corazón, y coraje, que contagie a las mayorías y a nuestros referentes para fortalecer la unidad que comience a sentar las bases de la reconstrucción de la Patria. Recordando al Papa Francisco, Nadie se salva solo, y como decimos nosotros, solo el Pueblo salvará al Pueblo. Read less