April 22, 2019 09:13
00:00 / 11:49
9 plays
"Esta es gente que cree que un pedazo de yeso pintado es dios". La Secretaría de Derechos Humanos, a cargo del sionista Claudio Avruj, no apeló una medida cautelar lograda por un grupo de abogados antiderechos y la obra -María Feminista- fue retirada de la muestra en la ex ESMA. Finalmente la obra María feminista –parte de la muestra “Para todes, tode”– tuvo que dejar la sala central del Centro Cultural Haroldo Conti y quedó encerrada en una de las oficinas del lugar. Así lo dispuso una medida cautelar generada por la denuncia de un grupo de abogados católicos antiabortistas: la cautelar entró en vigencia luego de que la secretaría a cargo de Claudio Avruj desistiera de apelar la decisión. La curadora de la muestra, Kekena Corvalán, así como las artistas que aportaron obras a la muestra y los trabajadores del Conti, denunciaron el hecho como un acto de censura: “En todos el mundo se exhiben esta clase de obras, pero solo se censuran en lugares donde hay dictaduras. Esto no se censura en democracia. Menos con la orden de una Secretaría de Derechos Humanos”, advirtió la curadora. Conversamos nuevamente con Kekena. "Esto es una locura". Read more
"Esta es gente que cree que un pedazo de yeso pintado es dios". La Secretaría de Derechos Humanos, a cargo del sionista Claudio Avruj, no apeló una medida cautelar lograda por un grupo de abogados antiderechos y la obra -María Feminista- fue retirada de la muestra en la ex ESMA. Finalmente la obra María feminista –parte de la muestra “Para todes, tode”– tuvo que dejar la sala central del Centro Cultural Haroldo Conti y quedó encerrada en una de las oficinas del lugar. Así lo dispuso una medida cautelar generada por la denuncia de un grupo de abogados católicos antiabortistas: la cautelar entró en vigencia luego de que la secretaría a cargo de Claudio Avruj desistiera de apelar la decisión. La curadora de la muestra, Kekena Corvalán, así como las artistas que aportaron obras a la muestra y los trabajadores del Conti, denunciaron el hecho como un acto de censura: “En todos el mundo se exhiben esta clase de obras, pero solo se censuran en lugares donde hay dictaduras. Esto no se censura en democracia. Menos con la orden de una Secretaría de Derechos Humanos”, advirtió la curadora. Conversamos nuevamente con Kekena. "Esto es una locura".